POR :NIXON TORRES CARCAMO
Abogado y Jurista de formación académica y científica
LA IDEA DE TRANSFORMACIÓN SOCIAL ESTÁ VIGENTE A PESAR DE LA DECADENCIA MORAL
El debate moral, compromete a los seres humanos que administran y/o están vinculados en o con los poderes públicos y son pagos, con la contribución tributaria del pueblo en general.
Generar, fomentar y alimentar de forma directa e indirecta corrupción en cualesquiera de las tres ramas del poder público; es la destrucción moral de la sociedad y la desaparición de legitimidad del estado.
Por ejemplo:
La conducta asumida por miles de hinchas por la selección Colombia, en Miami, creyendo que estaban en el circo normal de una sociedad Jesurún.
El hambre caníbal de cientos de servidores públicos y contratistas (No todos), de gobiernos anteriores y del actual gobierno.
La inmisericorde apariencia de personas de bien, siendo familiares y amigos de Ministros, directores de departamentos administrativos, congresistas tanto de derecha como de izquierda en casos que se evidencian a nivel territorial y a nivel nacional, fomentando la corrupción.
La capacidad de nominación o nombramiento de jueces en los territorios, por parte de los magistrados de los Tribunales; los convierte en la práctica, en los principales opositores de un concurso público, donde se elija por idoneidad y mérito a nuestros jueces.
Una Comisión Nacional del servicio Civil, dedicada a destruir el principio de mejoramiento continuo en el servicio público, por el contraterismo para la realización de los concursos que, nada tienen que ver en miles de casos, con el aspecto funcional y de conocimiento de los cargos sometidos a concurso; donde incluso se ha documentado que familiares de los que dirigen los contratos desde la universidades contratadas para el concurso, ganan los procesos, frente a quienes no son ni amigos. (Aún la Procuraduría General de la Nación no se ha pronunciado en las investigaciones que lleva; como la de la Universidad de Pamplona-Norte de Santander)
Estos casos emblemáticos y otros más, que no cabrían en este pequeño escrito, nos muestran que en la desmesurada hambre milenaria de los superdotados (as) y escogidos (as), no por Dios y por procesos legitimos de participación, sino por el sistema antidemocrático y corrupto que se sostiene en un estado de cosas inmorales, generado por las circunstancias de necesidad que producen socialmente en la gente y que la colocan en la posición de venta; nos indica que pareciera que la república, no tiene solución y es inviable, dado que estamos asistiendo al sepelio de la esperanza colectiva del pueblo.
Sin embargo. Creo que la crisis moral, ética, de principios y valores democráticos; nos fuerzan a construir una verdadera alternativa desde el sueño democrático de la ciudadanía y el compromiso, como dice Ramón Grosfoguel: de cumplirle las promesas al pueblo